ENVÍOS ÚNICAMENTE EN CDMX
- Rolex
- Patek Philippe
-
Relojería
-
Joyería
-
Compromiso
- Try On
-
Accesorios
- Servicios
- Nosotros
- Contacto
- Mundo Peyrelongue
- Rolex
- Patek Philippe
-
Relojería
-
Joyería
Compromiso
Colecciones Peyrelongue
-
Compromiso
- Try On
-
Accesorios
- Servicios
- Nosotros
- Contacto
- Mundo Peyrelongue
- Home
- MUNDO PEYRELONGUE
- Opinión
- Girard-Perregaux Laureato 38 mm Copper Diamond Bezel
Girard-Perregaux Laureato 38 mm Copper Diamond Bezel
02/04/2024
Opinión
Hace dos años Girard Perregaux nos dio una versión del famoso Laureato llamado simplemente 38 mm Copper.
Hoy nos llega una iteración similar, pero ligeramente distinta de aquel reloj que tuvo tan buena recepción en 2022, el Laureato 38 mm Copper Diamond Bezel.
Esta versión del Laureato ahora incorpora en su bisel octagonal un decorado con diamantes que enaltece la presencia del reloj.
La carátula continúa contando con esa tonalidad cobre y sigue teniendo ese sofisticado acabado Clous de Paris que le da ese relieve y textura que ha caracterizado al Laureato en tiempos recientes.
El mundo vio por primera vez el Laureato en 1975, esa época era una muy interesante para la relojería y a su vez era una muy emocionante, las distintas marcas relojeras comenzaban a usar más y más las máquinas de cuarzo y el Laureato era uno de esos relojes que incorporaban los nuevos movimientos.
En su momento este nuevo reloj era referido como un “Quartz Chronometer”, Cronómetro de Cuarzo.
En esta ocasión el Laureato no tiene un movimiento de cuarzo, dentro de su caja de acero de 38mm podemos encontrar un calibre automático GP03300, cuyo rotor de oro rojo de 18 quilates y otros decorados son visibles gracias a una tapa de cristal al reverso del reloj.
Algo que jamás cambiará sin importar el paso del tiempo o las distintas versiones que exista del Laureato es su esencia, ese lenguaje de diseño tan definido que tiene la colección y que hasta cierto punto se ha vuelto sinónimo de Girard-Perregaux.
Detalles como el bisel octagonal el cual se ha vuelto en un detalle imperdible en estos relojes o la manera en que el brazalete de acero está integrado de manera tan sutil con la caja, formando así un perfil inconfundible cuyas gentiles líneas le dan un aspecto tan ligero a esta colección.
Pero no solo eso, la combinación de todas estas características han creado un ícono inconfundible que bien podría argumentarse ha sido el rostro de Girard-Perregaux y uno que jamás será olvidado por los entusiastas de la relojería.